Y cuando menos te lo esperas, esa persona a la que dabas por perdida por culpa de errores pasados, vuelve a tu vida. Sin rencores,sin culpabilidades, sin reproches...solo con el deseo de recuperar esa amistad que hace meses existía.
Es en ese momento cuando te das cuenta que aquellos que valen la pena, si les importas, vuelven aunque no lo creamos posible. Mentiría si dijera que entiendo el que hayas querido volver, mentiría si dijera que entiendo todas las cosas que me dijiste...pero como ya dije yo en tu lugar no lo habría hecho; sigo creyendo que no lo merezco.
Pero entre toda esta sorpresa y alegría está la sensación de no querer perder está oportunidad, porque es así como lo veo: como una oportunidad de enmendar el error y poder recuperar esa amistad que nunca quise perder pero que por no saber diferenciar perdí.
Cosas asi y palabras como las de ayer son las que a la hora de la verdad demuestran quienes son personas que vale la pena tener cerca, y creo que eres una de ellas.
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