Cuando se te olvide te
susurraré al oído lo mucho que me gustas y aunque el destino no se haya puesto
de nuestro lado, siempre quedará el recuerdo amargo de lo que pudo haber sido y
nunca fue. Aunque quizás fue, que nunca pudo haber sido.
Te recordaré que menos
es más y que no era tan difícil. Y que si hubieras querido, sería yo con la que
te hubieses despertado cada mañana.
Que nunca es demasiado pronto para querer a alguien
pero si demasiado tarde. Que los problemas se solucionan con ganas y la
determinación que le pongas a tus decisiones, hará que tus días sean más o
menos extraordinarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario