Mentiría

Se me hace tan raro no escribirte ni dedicarte mis entradas como durante años he hecho,
que se me antoja sorprendente.
Me pongo ha pensar en cuanto no solo ha cambiado mi vida,
sino también mi visión acerca de la misma que me quedo sin palabras.
Creía que mi vida estaba cambiando a mal, porque tu ya no ibas a estar en ella.
Creía que no encontraría a quien dedicar ese tiempo.
Creía que solo tú eras capaz de ver las cosas buenas que hay en mi.

Pero cuan equivocada estaba.
Mi vida cambió mucho, pero para bien:
recuperé esa libertad a la que nunca me cansé
de renunciar solo por poder pasar un rato contigo.
Descubrí que hay muchas maneras de valorar a las personas
y que tú no me valorabas lo que yo merecía.
Comprobé como siempre hay alguien
que verá en mi lo que los demás no son capaces de ver.

Mentiría si dijera que no he tenido la tentación de hablarte.
Mentiría si no dijera  que una parte de mi se arrepiente
por esa firmeza con la que decidí que no merecías estar en mi vida.
Mentiría si no dijera que anhelo esa capacidad tuya de animarme
y de hacerme sonreír cuando nadie lo lograba...
Pero también mentiría si dijera que te echo de menos.

Ya no te dedico mis entradas, ya no escribo cuanto te echo de menos,
ya no plasmo mi dolor o mi enfado...
No es un milagro, aunque a veces crea que si.
Tiene un nombre, y se llama vida.
Vida en la que tu ya no estás ni quiero que estés.
Vida que quiero compartir con las personas de siempre
y con aquellas que acaban de entrar pisando fuerte.
Vida que no quiero que lleve
grabada en su piel el nombre de nadie, salvo que sea el mio...
Simplemente vida.